Descripción
Sorprende a tu madre con esta taza de cerámica que lleva la típica frase:
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No me, no me… Que te, que te…
O úsala para acordarte cada mañana de tu querida madre! 🙂 Puedes meterla en el lavavajillas y en el microondas, asi que puedes hacerle un cafecito a tu madre antes de pedirle perdón por la última vez que la sacaste de sus casillas.
Garantizamos achuchones madreros y un… Ay que hijo mas tonto tengo! porque todos sabemos que el amor de madre se mide en collejas cariñosas. Y si no le gusta para el café, no te preocupes, siempre puedes plantarle un cactus super mono, de esos que llevan una flor pegada y le quitan las radiaciones de la pantalla.
Eso si! no nos hacemos cargo de que tu madre te saque la taza cada vez que tu la saques de los nervios, y ojo, por que si tiene muy buena puntería tu maravilloso regalo puede volver como un boomerang cuando la enfades. También podéis establecer un código, y que prepararle un cafetico en súper taza se la manera de pedirle disculpas. Y es que ya lo sabes, las madres siempre tienen la razón!
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